¿Cómo cuido mi Kimonea?

¡Hola de nuevo!

Parece que la actividad en el blog vuelve a la normalidad y una vez al mes (para no agobiar😅) intentaré subir un post en el que os explique aquello que me vais pidiendo por redes, sobre todo por instagram, que es donde más actividad tenéis.

Hoy le ha tocado el turno a los cuidados de los kimonos. Me explico: cómo lavarlos, plancharlos, guardarlos,…

Os cuento: todas las telas de los kimonos que confeccionamos artesanalmente son cuidadosamente elegidas, no sólo por su estampado, colores, caída,… sino también por su practicidad. En estas ajetreadas vidas que tenemos (al menos la mía😋) no nos apetece demasiado ni planchar ni tener que llevar la ropa a la tintorería- con los costes que eso implica!-

Pensando en ello, TODOS (sí, sí, TODOS) los kimonos que os ofrecemos se pueden lavar fácilmente en agua, ya sea lavadora o si preferís a mano (aunque no es necesario). Basta con lavarlos con un programa de lavado corto (15 minutos es suficiente), agua fría y con poco centrifugado. Es preferible que el jabón sea líquido aunque no pasa nada si usáis el de polvos.

Antes de que los lavéis en vuestras casas, ya hemos hecho la prueba de lavarlos en la lavadora para asegurarnos de que no encojen, destiñen ni se dañan. Y, en el caso de que puedan desteñir, como por ejemplo en los tejidos “denim” os lo avisamos en la descripción del kimono, por lo que recomendamos que se laven solos o con prendas similares.

Recomendamos no usar secadora, para tenderlos lo mejor es ponerlos en una percha y colgarlos en el tendedero que uséis habitualmente y mejor en el lado ‘sombra’.

Sobre la plancha: la mayoría de los modelos no es necesario que los planchéis, aunque si os apetece le podéis dar una pasada a baja temperatura (¡sobretodo baja!). Los kimonos de lino, no os mentiré, sí hay que plancharlos un pelín a media temperatura, porqué al ser tejido natural tienden a arrugarse, aunque en verano es de lo más agradable llevarlos y sólo por ello merecen la pena.😉

¿Cómo los guardo? No es necesario tenerlos un armario a parte (aunque un armario sólo de kimonos sería lo más😊) ni cubrirlos con bolsa de plástico (eso nunca) ni de tela, con colgarlos en una percha dentro del armario suficiente. Cuando los llevéis de viaje, los podéis doblar y poner dentro de la bolsa de tela que os enviamos (que también es artesana y de algodón), ocupan muy poco espacio.

Y, ¡hasta aquí el post de hoy! Espero haberos ayudado.

Si os apetece saber alguna cosa, más u os surge alguna duda o comentario, estaré encantada de ayudaros en kimonea.te@gmail.com

Hasta la próxima 🤗

Vicky

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